La Fundación Raúl Mérida y su Arca de Noé, como respuesta y en agradecimiento a las palabras de Frank Cuesta acerca de la utilización de seres animales salvajes en espectáculos televisivos, enseña sus instalaciones y sus habitantes en este IMPERDIBLE VÍDEO (de veras, no os lo perdáis) en el que podemos ver el resultado de la inconsciencia de muchas personas y empresas que piensan que un animal salvaje es un juguete que se puede vender, comprar, usar cuando apetece, y finalmente tirar cuando molesta, cuando es viejo y no sirve, o cuando deja de ser una novedad graciosa.

El destino de esos seres después del abandono es la muerte por inanición, el atropello en carretera, los depredadores o las enfermedades, y antes de su fin violento hay incomprensión, miedo y mucho, mucho dolor... Solo los afortunados terminan en instalaciones como las de la Fundación Raúl Merida.

Como puede una sociedad civilizada permitir todo esto?

A raíz del afán sin sentido de convertir a seres animales salvajes en payasos de circo en un programa de una conocida cadena televisiva, está habiendo en España un despertar de consciencia muy necesario de muchísimas personas de toda clase social, edad, pertenencia política, creencia religiosa, etc.

Muchos se han pronunciados en este sentido, ha habido muchas voces en contra de ese abuso y de todo lo que hay detrás de esos espectáculos, voces mas y menos famosas entre las cuales destaca la de Frank Cuesta. Frank, una persona cuya vida familiar ha sido destrozada por encararse a las poderosas mafias del trafico de animales exóticos (se estiman más de 20.000 millones de dólares anuales de ganancias, estas son las cifras mundiales de este negocio ilegal), encuentra el tiempo y la fuerza para hablar a favor de esos seres que no pueden hacerlo. Y lo hace en este contundente vídeo.

Los seres animales son seres vivos y sintientes, NO objetos que se puedan comprar, vender y tratar como a nosotros más nos plazca y convenga. Si vender y comprar seres que llevan miles de años acostumbrados al animal humano -perros y gatos- ya va en contra de toda ética, arrancar a un ser salvaje de su medio natural solo porque nos hace gracia tenerlo en nuestra casa como si fuera un juguete, excede todo lo que se pueda considera humano...

Consciencia y responsabilidad. Que estos dos documentos gráficos lleguen a toda la población Española mostrando la cruda y dura realidad antes y después de cierto tipo de espectáculos, y que las personas que los vean y entiendan que esto no se puede permitir, actúen en consecuencia: no solo evitando comprar seres animales, exóticos o no, sino que haciendo el vacío alrededor de aquellos que hacen de la explotación, sufrimiento y en la mayoría de los casos la muerte violenta de miles, millones de seres inocente, un lucrativo negocio. Ningún apoyo para los individuos y empresas que basan sus ganancias en la explotación y el sufrimientos de los seres animales.

Y en lo que podamos, apoyemos con nuestro granito de arena a este tipo de asociaciones y santuarios, cada Euro cuenta, así como cuenta cada hora de voluntariado...
Lista de protectoras españolas.

Para que no haya nunca más almas rotas...

Laura

Bueno, por lo menos el tiempo permanece constante, 31 grados a las diez de la mañana, son las 11 y media de la noche y la temperatura solo ha bajado hasta los 28.

A la salida de Málaga relámpagos, tormenta eléctrica, típico...

A los pocos minutos algo golpéa el cristal del coche, durante los primeros dos, tres segundos me pregunto que es, lo que me está golpeando el coche... Supongo que esto es lo que significa vivir en la Costa del Sol, una no reconoce la lluvia en julio...

Tormenta de verano, de las que duran desde Riviera hasta Las Chapas pero que en esos pocos minutos parece que se está cayendo el cielo. Me encanta. No me gusta conducir con lluvia, pero esto me encanta. Tanta fuerza...

Y para terminar, doblada la curva y dejada la lluvia atrás, un único fuego artificial, una bola naranja en el cielo negro.

Me ha gustado esta vuelta a casa, uno de los viajes Málaga-Marbella más bonitos que haya hecho nunca.

Laura

No he podido evitar que te aterrorizen, que te torturen y que te quiten la vida. Otro año más no he podido salvarte.

Pero no te dejaré solo.

Allí estoy, a tu lado en las calles entre los chillidos de los borrachos que no quieren ver que eres exactamente igual que ellos.

Allí estoy, a tu lado en la plaza mientras la arena se tiñe de rojo con tu sangre, tu dolor y la eterna pregunta:

Allí estoy, a tu lado mientras exhalas tu último aliento, con una promesa:

Seguiré hablando por ti.
Seguiré gritando por ti.
Seguiré escribiendo por ti.
Seguiré llorando por ti.


Por ti.
Eres demasiado importante para que tu miedo, tu dolor y tu muerte no tengan sentido.

A ti, ser inocente que dejarás este mundo entre los aplausos y las risas de los inconscientes e ignorantes:

A los TORTURADORES y VERDUGOS:

(En realidad, tu, el toro, NI LO VES.)

(En realidad, yo, NO CONSIGO VER OTRA COSA.)

Ilias Mathes tiene un seguro contra el cierre de los bancos, los controles de capital y la drástica reducción de su pensión: su huerto.

Si la crisis financiera de Grecia empeora, como muchos creen que sucederá, Ilias podrá alimentar a sus hijos y nietos con los frutos de la generosa tierra de Karítaina, un orgulloso pueblo en la Arcadia Peloponesa.

"Tengo mi lechuga, mis cebollas, me voy a apañar", a pesar de no poder acceder al pago íntegro de su pensión. "Vamos a poder ir tirando durante un tiempo, no sé, dos meses, tal vez tres meses, porque también quiero dar a nuestros parientes. Si están sufriendo, no puedo dejarlos así, no? "

La producción de alimentos da a los que viven en los pueblos rurales de muchas zonas de Grecia una pequeña medida de confianza. Es un valioso alivio a pesar de que los recortes financieros causen grandes preocupaciones. Los que no poseen vehículo propio en Karítaina tienen que pagar 40€ de taxi para ir al banco más cercano y poder retirar 60€, la cantidad máxima diaria que se permite retirar con tarjetas bancarias.

El autobús a Megalopoli, la ciudad -a 17 kilómetros de distancia- con el banco más cercano, fue suprimido. Otra víctima de la austeridad. La mayoría de los residentes de Karítaina son jubilados, muchos no pueden conducir.

Algunos han decidido salir adelante con lo que tienen en casa en lugar de gastar los 40€ para aventurarse hasta Megalopoli y tratar de sacar dinero de los cajeros. "Estoy viviendo de la pensión del mes pasado", susurra Pancyotis Theodoropoulos, de 85 años. "Voy a intentar ir la semana que viene. Por supuesto que estoy disgustado. El gobierno nos ha estafado, se ha quedado con nuestras pensiones."

Entre los taxistas locales hay los que han reducido el precio de la carrera a la mitad para los pensionistas de Karítaina, desde que las pensiones no pueden ser retiradas íntegramente en una sola vez, pensiones que, además, suelen ser más bajas que para otros colectivos griegos.

A pesar del sentimiento que pervade las mentes de los griegos de la proximidad de una catástrofe, la fuerte tradición de hospitalidad del país se mantiene intacta. Ilias no permitirá que ningún visitante se vaya sin un fajo de verduras frescas y algunas "trachanas" y "chilopites," un tipos de pasta local que su familia hace a mano.

Muchos creen que la capacidad de ayudarse los unos a los otros con la comida confiere a Karitaina, con cerca de 100 residentes durante los somnolientos veranos y 30 durante el resto del año, mayores posibilidades de sobrevivir que las que tienen los habitantes de las ciudades que enfrentan la misma situación. Las comunidades rurales adoptan tácticas antiguas de supervivencia que les permiten superar periodos difíciles, como las privaciones de la Segunda Guerra Mundial y después de los desastres naturales. Los griegos tendrán sin duda que recurrir a esas tácticas de apoyo mutuo, durante esta crisis que azota su país.

"En el pueblo es más fácil vivir", afirma Ionnis Psilas, endeudado de por vida después del fracaso de su negocio de importación de coches. "Los vecinos te dan los productos de sus huertas y tu les das los tuyos. En Atenas los vecinos son extraños."

Fuente: Mail.com
Traducido y adaptado por: Laura Paglia